Tan solo mi vida.

Quise cerrar muchas veces los ojos, y que ese vacío que se presentaba ante mi se trasladara hasta mi mente, que borrara cada palabra, cada detalle que yo atesoré como una pequeña ilusionada; quise muchas veces no haberte conocido jamas, haber pasado de largo o que simplemente no hubieses ocupado un puesto a mi lado, que no hubieses rozado tu sonrisa con mi mirada o aun peor... que no hubieses discutido conmigo... de esa forma que me enloqueció, con ese ímpetu que despertó en mi una dormida convicción y que me recordó quien realmente soy, y no quien quieren que sea... Quise tantas cosas que ahora me causan gracia. ¡Que idiota he sido!
Porque jamas creí poder perder así la cabeza, jamas creí poder llegar hasta adonde estoy, jamas creí poder pasar largos días sin tener miedo alguno de que pasara mañana, porque pase lo que pase, se que estoy bien, y no porque alguien me haga sentir así, sino porque alguien me recordó inconscientemente que puedo (y por ello debo), ser feliz por mi misma, sin depender de nadie... sin importar los errores que se cometan a mi alrededor... porque son movimientos necesarios para llegar a nuestros respectivos caminos... Miro hacia adelante haciendo todos mis esfuerzos por ver algo y no veo nada, ¿sera que no hay futuro? o que ¿realmente tan solo importa el presente? pongo cimientos para un nuevo proyecto, pongo cimientos en mi, recuerdo mis convicciones y me aferro a ellas para entregar a este nuevo proyecto todo lo bueno que tengo y dejar a un lado lo que estorba, lo que nos duele, lo que nos hace mirar hacia atrás; y camino hacia adelante, con calma, disfrutando del paisaje y la compañía, pero sin saber hasta adonde y con quien llegare a puerto final... si es que lo hay.
Quise muchas veces cerrar los ojos, pero no lo hice, ahora quiero caminar, con la mirada al frente recibiendo todo lo que me han de mandar.