mi refugio

Tengo un cuarto amplio, lleno de luz, en alguna vieja y concurrida ciudad, una cama en el suelo, atiborrada de cojines y de sueños, vivo, juego, descanso y creo en ese centro de vida. Mi cuarto-hogar tiene ligeras cortinas por donde se filtra el sol y el murmullo de las calles del viejo continente; Mi refugio está tapizado por los libros y fotografías que han acompañado mi corta vida, las carcajadas de algunas noches rasguñan las paredes y abrazan mi pequeño mundo, que he construido en una nube, en un sueño, para luego en un pronto lejano hacerla bajar a esta inmensa tierra.